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| AUTORA: PATRICIA CD |
De nuevo empezaba una larga semana de trabajo y cinco días
al menos sin volver a ver a Sergio, al menos dentro de poca venia un puente
nacional y tendría varios días para descansar en casa. La semana se me hizo
larga, deseaba que llegara el fin de semana para volver a la casa de mi macho,
me estaba enamorando y es que Sergio me hacía sentir una puta total además de
verme recompensada satisfaciendo las necesidades de un buen macho.
El miércoles cambio por completo mi estado de ánimo, no me podía
creer lo que Sergio me proponía para el siguiente fin de semana, como el
siguiente lunes y martes eran fiesta nacional. Sergio había reservado un chalet
a las afueras de Gandía, el plan era el siguiente, salir el viernes por la
tarde para llegar a la casa de madrugada y marcharnos a descansar. El sábado empezarían
nuestras vacaciones allí, el sábado iríamos de tiendas para comprar cosas para
nuestros cuatros días en la casa y de paso para que yo fuera de compras para
aumentar mi armario y a la noche salir de fiesta, el resto del viaje Sergio
dijo que ya iría improvisándolo según la marcha, pero que tenía alguna cosa más
pensada que todavía no me quería desvelar.
Aparte puso un enlace de la casa, era un chalet recién
reformado con una decoración modernista con un cierto toque lujurioso, tenía
dos plantas aparte de un jardín con su correspondiente piscina. Yo no me lo podía
creer, cinco días fuera de casa con Sergio, por mi misma comprendía que allí no
me conocería nadie y podría salir a la calle vestida de nena, tenía mis dudas
pero sabía que con la compañía de Sergio todo sería mucho más sencillo. Rápidamente
le conteste, dije que ya vería como me escaparía de casa por tercer fin de
semana consecutivo, pero que yo ya tenía libertad para hacer lo que quiera y
por eso en casa no me iban a poner muchos problemas pero que si iban a
sospechar un poco.
Sergio me contesto el email en el mismo día, me daba cita en
su casa el viernes a las ocho de la tarde y que debía llevar una maleta con mi
ropa de nena y mis cosas de chica a la que yo le conteste que estaba de acuerdo
y que el viernes a las ocho en punto estaría en la puerta de su casa.
Nos saludamos y fuimos hacia su coche y allí metí mi maleta
en el maletero del coche, que era un todoterreno y nos montamos en el coche y
comenzamos a hablar. Pronto salimos de la ciudad y llegamos a la autopista, en
esos momentos comenzamos a hablar de nuestras cosas y pronto surgió que congeniábamos
bien, estuvimos hablando de nuestras visitas al psicólogo y sobre lo que hablábamos
allí con Pepi y nuestros perfiles de verdad que coincidían, Sergio era un
fetichista del sexo y yo era como una ninfómana en celo cuando me ponía ropa femenina.
Este conversación nos termino poniendo calientes y Sergio me
dijo que ya era hora de que me vistiese de nena, a mi la idea me calentó
demasiado como todo lo que pasaba por la mente calenturienta de Sergio,
buscamos una gasolinera solitaria de pueblo y mientras Sergio repostaba yo me
fui a los cuartos de baño que estaban en la parte trasera de la estación de
servicio. Por supuesto entre en el baño de señoras que estaba completamente vacío
y allí saque una bolsa de tela que previamente Sergio me había dado antes de
salir del coche.
En el había una mini-falda de cuero ajustada, unas medias de
rejilla a juego con unos taconazos todo de color rosa, también había un tanguita
y suje con relleno de color azul oscuro y un corsé blanco y negro que apretaba
mi cintura y mis pechos. Salí del servicio y como habíamos hablado antes Sergio
estaba allí esperándome dentro de su coche.
Entre al vehículo y me puse en el asiento del copiloto y
emprendimos el viaje, de nuevo empezamos con nuestra típica charla caliente, Sergio
me decía la bien que me sentaban mis trapitos que estaba buenísima con ese corsé,
yo pude comprobar cómo Sergio la tenía ya morcillona, yo estaba algo caliente
vestida de zorra viajando hacia valencia con un macho medio empalmado a mi
lado, quería cumplir otra fantasía y ya que Sergio iba a conducir todo el rato
le propuse una de mis fantasías que le encanto, no era otra que hacerle una
buena mamada mientras el conducía, el acepto encantado y al poco tiempo yo ya
estaba inclinado sobre su miembro tragando polla como una putita con Sergio me sentía
libre.
Mientras se la mamaba notaba la palanca de cambios sobre mi
barriga y mi cabeza se llenaba de pensamientos calenturientos mientras hacía
aquella mamada en movimiento, mientras le día a Sergio “cariño me encanta mamártela
en el coche así aprovechamos el viaje”, amor hago esto para que vayas relajado
mientras conduce y así tu putita tampoco se aburre”.
Al cabo del rato, ya me dolía la espalda de estar en esa
misma posición todo el rato y también que llevaba más de 45 minutos tragando
polla, Sergio se desvió de la autopista y cogió un tramo de carreteras
secundarias. Pasando por pueblos en mitad de la noche, rodando despacio por sus
carreteras, allí me sentía muy putita, incluso en un pueblo unos borrachos que
estaban en la puerta de un bar lograron ver la escena cosa que me excito mucho
que me vieran esos señores de pueblo, mas adelante Sergio paro en una carretera
solitaria y totalmente a oscuras, me hizo salir del coche y ponerme frente a él
con las luces encendidas del coche, me ordeno que me arrodillara y yo obedecí rápidamente.
Sergio me puso su pollon frente a mi cara y comenzó a chorrear semen que me
lleno de lefa, mmmmm, que sensación mas caliente era aquella, arrodillada en
mitad de la nada en una carretera de la mala muerte alumbrada por los faros de
un coche y con la polla de Sergio encima de mi cara llenita de semen. Rápidamente
nos metimos dentro del coche y continuamos nuestro viaje, tampoco queríamos que
alguien nos pillara y menos la guardia civil que solía frecuentar ese tipo de
carreteras.
Por supuesto no me limpie la cara en todo el viaje y este
pequeño detalle a mi macho le encanto, cuando llegamos a Gandía nos fuimos al
chalet que Sergio había alquilado, estaba en un sitio tranquilo pero no alejado
de la urbe, dejamos el coche en el garaje, sacamos las maletas y las dejamos en
el salón, dimos un vistazo a la casa y nos marchamos a dormir porque el día de
mañana prometía y mucho, pero antes de acostarme fui al cuarto de baño, limpie
mi cara de restos de semen me puse mi camisón morado y me fui a la habitación a
dormir con Sergio, ambos necesitábamos descansar.
A la mañana siguiente teníamos planeado salir de compras al
centro comercial, el plan era que por la mañana iríamos de tiendas a comprar
trapitos para la patri comeríamos en el centro comercial y después ya por la
tarde iríamos de compras ya para la casa a comprar la comida y las demás cosas
que nos hacían falta. Me levante temprano por que estaba nerviosa porque iba a
cumplir una de mis mayores fantasías, prepare el desayuno y desperté a Sergio
para desayunar, habíamos hablado de ir temprano al centro comercial y así
aprovechar todo el día allí desde que a las 10 de la mañana abrieran sus
puertas.
Tras desayunar me fui a al cuarto de baño. Me tenía que
duchar y arreglar por fin iba a ir de compras vestida de tía, por fin iba a
saber lo que era esa experiencia. Entrar en tiendas de ropa femenina; ver sus
trapitos, probármelos sin miedo a que un conocido me pueda ver, ir de una tienda
a otra y después por la tarde ir de compras para la casa. Me puse el vestido
rosa ajustado que Sergio me regalo junto al conjunto de lencería blanco con
medias a juego y los tacones rosas. Me maquille bien durante más de media hora
para parecer lo mas femenina posible, ya que iba a estar en el centro comercial
rodeado de mujeres y quería parecerme a ellas lo máximo posible y para terminar
me puse mi peluca rubia.
Salí del baño y Sergio ya me estaba esperando en el salón,
no había tiempo que perder bajamos al coche y nos dirigimos al centro comercial
donde había muchos tipos de tiendas. Salimos de la casa y nos metimos en el
coche, no pude olvidar la aventura de la noche anterior en aquel habitáculo y
no pude evitar empalmarme.
“Vaya Patri si ya vas cachonda perdida. Tienes ganas de
llegar al centro comercial y pasar el día así vestida ¿verdad?”
Pues la verdad es que si, s una de mis mayores fantasías ir
de compras a un centro comercial vestido de patricia, además esta el aliciente
de comer allí y por la tarde ir a comprar las cosas de la casa.
Si Patri, después de comprar tus cositas tenemos que hacer
la compra para la casa, ya sabes comida, material de limpieza, etc.
Así transcurro nuestra conversación hasta el centro
comercial, una vez allí aparcamos cerca de la puerta por que aun era temprano y
había poca gente. El sitio era grande con muchos tipos de tienda desde ropa
hasta decoración pasando por zapaterías o perfumerías. Sergio me pregunto qué a
que tienda quería ir y le dije que a Mango allí vi un vestido asimétrico,
ajustado por arriba y faldita corta pero poco ajustada, lo que me llamo la atención
era su color rojo y con manchas negras. Luego fuimos a ver tacones que era el
motivo por el que entre en esta tienda,
me enamore de unas sandalias negras con plataforma color guepardo y
suela + tacón dorados eran precioso y a Sergio también le habían gustado fuimos
a ver algo de lencería pero no me gusto la que tenían y fuimos para caja ya que
la cuenta subía un poco 55 euros pero daba igual tenía algo de dinero ahorrado.
Pero a la pagar Sergio se adelanto y pago la cuenta, después me explico que el pagaría
las compras de la mañana y yo pagaría las compras de la tarde, fuera de la
tienda no pude evitar darle un morreo y es que un macho que te compra ropita no
tiene precio.
Después fuimos al Berska a ver algún vestido pero ninguno
era de mi estilo eran fresquitos y anchos y esa clase de ropa no era para mí, así
que fuimos a buscar alguna minifalda o short cortito. Vi una faldita normal
pero ajustada era estampada, preciosa de color blanco con puntos azules y rojos y también tenían un top a juego todo por
15 euros así que lo añadí a la bolsa, fuimos a ver también los zapatos que tenían
es algo habitual cuando entro en una tienda de ropa femenina, pero esta vez no tenían
nada de mi gusto a sí que nos fuimos de la tienda con el conjunto de top y
faldita estampado.
Después fuimos al New Yorker donde venden muy buena lencería
y allí me compre un conjunto de suje y braguitas tipo guepardo, un camisón para dormir
precioso con suje blanco y azul y el resto tela trasparente de color azul. Después
entramos a Megacalzado zapatería con mucha variedad y Sergio me señalo una cuña
alta de color serpiente blanca y negra, por supuesto fue a la bolsa de la compra
y por ultimo cogí unan sandalias negra de tacón altos elaborada a base de
correas en la zona del empeine del pie.
Fuimos a guardar todas las bolsas al coche. Estaba seguro
que la compra no superaba los 250 euros quizás algo cara. Metimos las bolsas en
el maletero y Sergio dijo:
“Vaya Patri has hecho muy buena elección, 22º euros todo y
ropa muy sexy, sabes tienes un presupuesto de 500 euros pensé que serias e
comprarte más trapitos” “Que te parece si vamos a un sex-shop del centro y
gastamos el resto del dinero allí”
Pues no se qué decir
“Se sincera patri, estas con tu macho”
Pues me gusta la idea, además 280 euros es mucho dinero pero
en esos sitios las cosas son caras
“Tu no te preocupes por el dinero Patricia, además todo lo
que venden allí nos va a gustar a los dos, será una buena y placentera inversión”
“¿Entonces Patri, vamos al sex-shop?”
Vale, cariño
Me sorprendí hasta yo misma, que me pasaba ese chico me
tenia tontita, me estaba enamorando?
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